Rubia puta follada duro sobre el escritorio del jefe. Se fotógrafa el coño y las tetazas con el movíl y cuando llega el varón y las encuentra en su teléfonon, se queda de piedra. Ella sabe como responder y empieza a actuar como si fuera una prostituta. El jefe se excita y la folla duro contra su escritorio sin condón gozando como cerdos acabandole en su golosa bocaza de zorra.